Tan importante es atraer talento hacia la compañía como retenerlo. Hoy, los empleados dejan a sus jefes, no sus puestos de trabajo.

Sin duda, hoy en día, las organizaciones son conscientes de que las personas constituyen su capital más importante y la gran ventaja competitiva. Esta realidad se traduce a nivel empresarial en objetivos y estratégias basado en la atracción, gestión y retención del talento humano.

Tan necesario es atraer talento hacia la compañía, como identificar el talento potencial existente en la organización y desarrollarlo. Y lo más importante, retenerlo. Para conseguirlo, es necesario atender a variables como la edad, las necesidades y motivaciones de las personas.

Sin embargo, las organizaciones se mueven muy rápido, cambian, y cada vez resulta más difícil adaptarse a las exigencias del mercado,
prevaleciendo los objetivos económicos y relegando las políticas dirigidas a gestionar y retener el talento.

Por eso, una solución es contratar un profesional externo que actué como un partner. En base a mis experiencias, la tarea de retener estos talentos no consiste tanto en desarrollar programas caros, o proporcionar un incentivo económico (necesario e insuficiente), como en buscar alternativas satisfactorias con las personas, respetando sus necesidades, y en concordancia con la cultura empresarial.